Inciensos y Resinas
Los inciensos los tienes en diferentes formas o presentaciones, según el gusto o necesidad de cada usuario.
Se les clasifica de dos maneras:, el procesado en varillas o en conos, que son los más fáciles de quemar (no por ello son menos efectivos), y los que vienen sin procesar directamente en resina; éstos son más elaborados para su quema, ya que requieren del carbón litúrgico. Las resinas son más duraderas y quizás más propicias para según qué tipo de rituales.
Los inciensos en sí, aparte de sus aromas y propósitos, nos conectan con nuestra parte más interna de nuestros sentidos. Su olor es capaz de transportarnos en el tiempo y espacio. Cada fragancia nos provoca un efecto diferente, por esto siempre tendemos a tener dos o tres preferidos.
Los inciensos no solo sirven para crear ambiente, sino que potencian nuestros propósitos, rituales y encantamientos.
Son capaces de hacernos notar más nuestras emociones, transformar el ambiente hacia la espiritualidad y la relajación, para conseguir una paz interior y mejorar tanto nuestro estado de ánimo, como nuestra fuerza interior.
Por ello, siempre potencian y mejoran nuestras peticiones.
Se utiliza desde tiempos inmemorables en ceremonias, rituales religiosos, limpiezas y sanación del cuerpo y el entorno. También para quitar las malas energías, combatir la mala suerte, espantar espíritus y atraer todo lo que necesitemos: amor, sexo, buena suerte, éxito, etc.